sábado, 18 de febrero de 2012

PALOMA CASERA COMÚN: CONTROL


PALOMA CASERA SILVESTRE, Columba livia, ESTRATEGIAS PARA SU CONTROL                                                                                                                           

Cuando la presencia o actividad de palomas caseras silvestres significa un problema para las personas, para los edificios o monumentos, etc. y se hace necesario neutralizar tal situación se debe proceder recurriendo a estrategias de "manejo integrado". 

El "manejo integrado de palomas" se fundamenta en la utilización programada de un conjunto de técnicas tendientes a llevar el problema a niveles tolerables, teniendo en cuenta la biología y el comportamiento de la plaga,  los aspectos estéticos y funcionales de lugar afectado,  el cuidado del medio ambiente y de la fauna no problema.

Ante la presencia de cualquier problema es necesario tener un diagnóstico que determine la naturaleza y origen del mismo, y que de información sobre todos los factores que pueden  estar influyendo en la dinámica del mismo.
Provocan daños en las luminarias de la Ciudad.
El principal objetivo del manejo de una infestación de palomas es lograr una disminución de su número en el lugar donde se plantea el problema, para ello se requieren acciones sobre su comportamiento y su tasa reproductiva.

Al implementarse cualquier técnica de control, las palomas reaccionan ante la interferencia del hombre desarrollando respuestas compensatorias a los factores modificados como manifestación de su gran capacidad adaptativa o, dicho de otro modo, a su carácter de "grandes oportunistas".  En consecuencia, es de vital importancia para el éxito de un programa de control poder predecir cómo van a actuar esos mecanismos de compensación ante la ejecución de las diferentes técnicas que van a ser utilizadas.

La predicción de las repuestas compensatorias requiere un acabado conocimiento de la biología y del comportamiento de las palomas, de su adaptación al sitio, de los elementos favorables para el asentamiento que ofrece el lugar con problemas, y de cada factor que pueda actuar como limitante sobre las palomas establecidas como problema.

Para resolver muchos de los problemas causados por palomas se requiere una sustancial cuota de ingenio e imaginación, simplemente porque los problemas son muy variables por el ambiente en que se desarrollan, por las distintas características físicas de los sitios invadidos y por la complejidad de su biología y comportamiento.
Instaladas en fábricas atentan contra la calidad de la producción de alimentos.
En consecuencia existe una gran variedad de alternativas disponibles para intentar resolver un problema de palomas incluyendo: saneamiento, técnicas de exclusión, de disuasión y de ahuyentamiento, capturas con trampas, pastas repelentes, productos químicos repelentes o controladores de la reproducción.

Entre las acciones que pueden ser implementadas para resolver problemas de palomas es posible identificar dos grandes grupos:

1. Acciones indirectas: Manejo de factores limitantes.

ü  Reducción de la oferta de alimento.
ü  Reducción de la disponibilidad de agua.
ü  Reducción de las posibilidades de asentamiento: Exclusión y disuasión.
ü  Protección de los enemigos naturales.
ü  Educación.

2. Acciones directas: Manejo poblacional.

ü  Remoción de nidos.
ü  Repelentes químicos.
ü  Reguladores de la reproducció.
ü  Captura.

La reducción de la oferta de alimentos tiene muy buen efecto sobre la reducción de la presencia de palomas, pero hay aspectos socio culturales de difícil manejo. Hay valores afectivos personales que llevan a un individuo o a un grupo de ellos a volcar sus necesidades afectivas en algún animal, un canario, un perro, gatos o las palomas y, con frecuencia, se convierten en sus protectores acérrimos. Es aquí donde el manejo integrado de plagas exige la participación de organismos oficiales o de asociaciones no gubernamentales en la programación y realización de campañas educativas tendientes a limitar acciones de la población que favorezcan la presencia irrestricta de palomas y que creen conciencia de la importancia de su control.
Palomas alimentadas por un vecino de calle  Patricias Mendocinas en en Centro de Mendoza



Los sitios donde las palomas pueden encontrar alimentos en forma casi permanente son focos de atracción que llevan a su asentamiento en el lugar o en las inmediaciones. Los alimentos desparramados o desechados en caminos, corralones y mercados,  los desechos domiciliarios, los sitios de acumulación de residuos en fábricas, hospitales, y todo tipo de basurales son factores de atracción para las palomas.

Un hecho cotidiano observado en plazas y escuelas, es el aprovechamiento que hacen las palomas de los restos de comida que quedan en el suelo. En los patios de escuelas y colegios, los alumnos comen galletas, sándwiches, alfajores, etc. y quedan migas que son comidas por las palomas después de los recreos. Además, en plazas y parques, se ven personas que se dedican expresamente a alimentarlas.

Palomas en el techo de un edificio en el cementerio Parque El Descanso de Mendoza, donde se alimentan de semillas, entre ellas las semillas de uva que se encuentran en el orujo usado para mejorar el suelo.
Parque El Descanso, Mendoza. Foto de D. Mur, 2007.
Todo plan de higiene y mantenimiento deber contemplar estrictamente la eliminación efectiva y económica de todas las fuentes de alimentos disponibles para las palomas. Cabe recordar que tales circunstancias también son favorables para la multiplicación de moscas, cucarachas, roedores y malos olores.

De todos modos es notorio que aún con el mejor plan de saneamiento urbano en pleno funcionamiento, las palomas encuentran en ámbitos urbanos una gran variedad de alimentos: frutos y semillas de plantas ornamentales, césped, brotes tiernos, etc. y, por su gran capacidad de vuelo, pueden encontrar sus alimentos en lugares cercanos y mantener sus sitios de asentamiento y nidificación en medio de las ciudades.

Reducción de la disponibilidad de agua debida a pérdidas de cañerías, mangueras o llaves en terrazas y techos, a la presencia de tanques de agua con la tapa rota o ausente o con pérdidas en conexiones y llaves de paso,  y a sistemas o torres de enfriamiento de equipos de refrigeración que son importantes factores de atracción de palomas.

Estos hechos se observan en lugares altos, tranquilos y permanecen sin solución durante largo tiempo aunque, en general, son fácilmente remediables. Pero, además de atraer a las palomas llegan a convertirse en una grave causa de enfermedades gastrointestinales por la contaminación del agua de los tanques con estiércol, plumas y hasta con palomas muertas.

Palomas bebiendo en un charco en Plaza Italia de la Ciudad de Mendoza.
En plazas, paseos  y parques existen fuentes, bebederos, juegos de agua, riego artificial o agua de lluvia,  que son aprovechados por las palomas. Acequias  y canales también son fuentes de agua disponibles para las palomas.  Indudablemente no es posible eliminar tanta  disponibilidad de agua ya que su presencia es inevitable de tales sitios.

Los enemigos naturales de las palomas son algunas aves rapaces, reptiles, felinos y roedores depredadores de huevos y pichones. Si bien todas estas posibilidades juegan un cierto papel en el monte, en parques y reservas naturales, ninguna de ellas es fácilmente manejable en el ámbito urbano. Cabe añadir  que por ser aves introducidas, no existen enemigos naturales de las palomas suficientes ni eficientes como para mantener a las poblaciones silvestres bajo control en ámbitos urbanos.

Puede pensarse que con varias águilas podría protegerse cierta superficie, pero al tenerse en cuenta el tamaño del " territorio " explorado y defendido naturalmente por estas aves, su capacidad diaria de consumo de aves, roedores, etc. y la población de palomas en una ciudad, para ver la magnitud del desequilibrio en favor de la sobrevivencia y multiplicación de las palomas.

Por otra parte debe considerarse que si bien la estructura urbana ofrece a las palomas condiciones similares a las de sus sitios de origen (acantilados rocosos en el Norte de África, España, etc.), esa misma “estructura urbana” no es la adecuada para la acción de las aves rapaces ya que su hábitat natural implica la presencia de áreas abiertas para poder desarrollar sus estrategias de vigilancia y captura de presas.


Recurrir al uso de aves rapaces o cetrería, es una alternativa vista con simpatía desde varios puntos de vista, sobre todo  desde lo ambiental,  pero es una herramienta que no resuelve los problemas ya que no actúa sobre los factores determinantes de la presencia de palomas.

La educación, como en tantas otras circunstancias, es la principal medida preventiva que se debe activar a fin de diferenciar entre lo simbólico y lo real, entre lo tolerable y lo deseable de la presencia de determinados animales en el entorno. Educación que permita identificar riesgos, que ayude a separar lo emocional de lo racional y que dé las pautas para la tenencia y manejo responsable de animales. Educación que permita gozar de las bellezas del mundo animal pero sin compremeter la salud de las personas ni la integridad de sus bienes, y respetando los requerimientos propios de la naturaleza de los animales.

La reducción de las posibilidades de asentamiento constituye una acción de trascendencia ya que por su origen, la palomas casera está adaptada a ubicarse en oquedales en acantilados rocosos, y por ello se adapta muy bien a los ambientes hechos por el hombre (todo tipo de edificios, galpones, tinglados, etc.), en consecuencia es el ave-plaga mas problemática en áreas urbanas y también en comunidades rurales.

No es una especie netamente arborícola, aunque a veces utilizan árboles muy cercanos a edificios con altas infestaciones. Pero suelen colonizar palmeras, principalmente dos especies muy común en plazas y calles: Phoenix canariensis y Washingtonia sp..
Las palmeras albergan  numerosas palomas y les brindan alimento (dátiles) y un sitio para anidar
 como es fácil de ver en el parque Grl. San Martín y en plazas y calles de Mendoza. 
En cambio, la especie Columba maculosa (paloma manchada o turca) tiene hábitos típicamente arborícolas y normalmente se la confunde con de Columba livia. Su presencia en la Ciudad de Mendoza se ha hecho muy notoria en los últimos años y es causante de gran cantidad de pedidos de control por la caída de sus excrementos sobre veredas, automóviles y personas. Esta circunstancia siempre ocurre en coincidencia con un árbol, cables o postes que actúan como perchas o como sitios de asentamiento y nidificación.

La abundancia de sitios para posarse (cornisas, cumbreras, muros, ventanas, canaletas, equipos de aire acondicionado, aleros, techos, torres, campanarios, etc.) en los edificios asegura que las palomas caseras silvestres tendrán innumerables y amplios espacios disponibles para reposar, haraganear y multiplicarse.

Atentan contra el patrimonio culturar dañando onamentaciones, pintura, etc.  como se ve en
el templo de de San Francisco en la Ciudad de Mendoza.
La mejor y mas permanente solución al problema de palomas y de otras aves que reposan o anidan en un edificio es transformarlo en un sitio inóspito para  estas aves o "a prueba de palomas" mediante la implementación de técnicas de exclusión y disuasión. 

Las aberturas de los edificios, las estructuras que soportan los techos en galpones y depósitos, algunas estructuras en los puentes, etc., pueden ser protegidos mediante mallas hexagonales de alambre fino no oxidable (galvanizado) la cual también será efectiva contra tordos y gorriones.
Mallas metálicas (tipo gallinero) son efectivas y durables para evitar que las palomas se instalen en las estructuras.
Las mallas o redes plásticas reemplazan o complementan las mallas de alambre en trabajos para el control de palomas. Estas mallas pueden adaptarse mejor a determinadas estructuras (decoraciones de frentes, capiteles de columnas, etc.) son de fácil fijación y resultan prácticamente invisibles.
Telas plásticas poco visibles y efectivas para l imitr el acceso de palomas a las ventanas.
En muchas situaciones es suficiente la realización de adecuados trabajos de mantenimiento y de la limpieza de las estructuras para mantener alejadas a las palomas.

Repelentes físicos. Estructuras metálicas o plásticas con puntas aguzadas u otro tipo de elementos para evitar que se posen,  resultan altamente efectivos como barreras físicas  pueden ser instalados en forma permanente en bordes, cornisas, vigas, tensores, alféizar de ventanas y en otros sitios angostos que suelen ser aprovechados por las palomas para posarse, reposar o anidar.

Pinchos que impiden el acceso de palomas a sitios de apoyo.
Una vez limpio el lugar, se colocan los pinchos para anular la posibilidad de que sea ocupado  nuevamente por palomas.
  
Los pinchos colocados sobre la pestaña o cornisa arriba de la ventana evitan el asentamiento de palomas.
La incomodidad que les producen las puntas metálicas o la imposibilidad de las aves de sostenerse en ellas las obliga a buscar otros sitios para su asentamiento. Existen diversos tipos y modelos de estos elementos (Ecoave, Avestop. etc.) los cuales están comercialmente disponibles en forma de bandas que pueden instalarse fácilmente con clips sujetadores, con atadura de alambre, con clavos o tornillos, o con pegamentos apropiados.
Pinchos sobre el respiradero, tela metálica sobre los laterales del mismo, y un alambre tensado a lo largo
de la cumbrera limitan totalmente el asentamiento de palomas en este techo.
Es común verlas en las cumbreras de los edificios y en las cornisas. Las palomas también se posan sobre cables, barandas de balcones, cañerías y vigas muy angostas, en estos casos un alambre fino  puede tensarse a una altura de unos 7 ó 8 cm por sobre tales elementos. El alambre debe ser suficientemente fino como para que las palomas no puedan sostenerse sobre el mismo y, a la vez, suficientemente fuerte como para soportar las tensiones o cargas propias del sitio a proteger. El espacio entre el alambre y el lugar protegido les resulta insuficiente e incómodo para posarse.

Hay repelentes químicos de aves que son untuosos al tacto (pegamentos, pastas, geles), pueden ser aplicados sobre las superficies de muros, cornisas, vigas y otras salientes donde las palomas acostumbran a posarse o donde anidan. Estos materiales no son tóxicos y están diseñados para que las aves eviten posarse sobre las superficies tratadas pero sin que queden allí atrapadas.

Si bien estas sustancias llegan a ser efectivos repelentes en muchas circunstancias, pierden sus características con el tiempo, principalmente por la acumulación de polvo, hollín, hojas, plumas, etc. Algunos repelentes de este tipo también son afectados negativamente por temperaturas elevadas que pueden favorecer su escurrimiento. En superficies muy porosas, la efectividad se reduce notoriamente. Pueden llegar a tener una vida útil, luego de aplicados, de algunas semanas.

La principal limitación en el uso de estas pastas o geles repelentes es que deben ser aplicados repetidas veces para tener resultados prolongados en el tiempo. Lo cual significa costos elevados propios de trabajos en altura.  No deben ser utilizados sobre superficies visibles  tales como molduras decorativas, estatuas, etc. pues quedará notablemente comprometida la estética de tales superficies.

Hay elementos para asustar a las aves que actúan como repelentes sonoros y visuales, pero en general son de limitada eficacia como ahuyentadores de palomas. Estas rápidamente se acostumbran a las siluetas de aves de rapiña de plástico, a las serpientes de goma, a los molinetes de aluminio, a luces intermitentes, etc.. Los dispositivos repelentes por emisión de sonidos tales como explosiones intermitentes (bombas de carburo -gas acetileno-) (cañón sonoro  accionado con gas propano), sonidos producidos electrónicamente, bio-acústica (llamadores), pirotecnia y sapitos (shellcrackers), aunque pueden ser muy efectivos para algunas aves, muy rara vez dan resultados duraderos en el control  de palomas.

Al advertir que el globo no significa amenaza alguna aún cuando está en movimiento
las palomas lo ignoran totalmente.
Recientes trabajos con metilantranilato (sustancia de ocurrencia natural en algunas variedades de uva)
han mostrado resultados promisorios como  repelentes de palomas y de otras aves en cultivos agrícolas y han permitido su registro en cultivos de girasol y sorgo en Argentina. Están en marcha ensayos en otros cultivos y en el control de aves en zonas urbanas.

Ultrasonido, ondas electromagnéticas y similares. La información científica disponible indica que al presente no hay dispositivos o sistemas basados en estos elementos que sean de utilidad en el control de palomas. Su demanda y a veces su éxito comercial, se deben a que satisfacen la ilusión de disponer de un pequeño aparatito, casi mágico, que con solo encenderlo va a resolver los problemas.

En una ciudad se presentan infinidad de fuentes de todo tipo de sonidos en forma permanente, con picos de gran intensidad a determinadas horas, mientras tanto las palomas medran sin dificultad inclusive en los puntos mas ruidosos. Bocinas de todo tipo de vehículos, estridencias debidas a silbatos, sirenas de ambulancias, alarmas contra robo de automóviles, etc. no perturban la vida de las palomas en ciudad alguna. Si se agrega un sonido mas en una ciudad: el ultrasonido, es posible que en un principio provoque cierta alarma, pero en muy corto tiempo, y a veces en forma inmediata, pasan desapercibidos a estas aves urbanas.

La remoción de sitios de anidamiento puede ser de ayuda en tratar de evitar el aumento de las poblaciones de palomas, pero para ser efectiva los nidos deben ser eliminados con mucha frecuencia, al menos cada dos semanas. Esto funciona bien cuando se realiza juntamente con otros tipos de estrategias de reducción poblacional, pero a menos que esto se haga durante largos períodos, se logran muy pocos efectos sobre colonias ya establecidas. Para ser efectiva, la eliminación de nidos debería ser continuada hasta que la mortalidad natural elimine a los adultos sobrevivientes.

Control reproductivo. Algo que ha ha exitado notablemente la imaginación de muchos biólogos y ambientalistas es la posibilidad de utilizar inhibidores de la reproducción en palomas.  El control de poblaciones mediante el uso de productos esterilizantes parece ser el método ideal para el control de palomas.

En estos últimos años se ha trabajo con cierto éxito con nicarbazine, sustancia que no evita la oviposición sino que actúa sobre la viabilidad de los huevos. Tanto en Estados Unidos como en Europa se han aprobado cebos con nicarbazine para el control de palomas. Estos productos deben ser administrados en forma permanente para evitar la reproducción, lo cual significa una serie de dificultades operativas que resultan en costos considerables y en resultados inciertos.  Pueden ser tenidos en cuenta como parte de una estrategia de manejo integrado del problema de palomas especialmente a nivel municipal.

Los resultados de ensayos con nicarbazine realizados en la Universidad de Nebraska, E.Unidos, en 2008,  concluyen así: “Con una adecuada provisión diaria de cebo, encontramos que nicarbazine es un seguro y efectivo inhibidor reproductivo de C. livia.  A pesar de la extensión del período del ensayo, las palomas que intervinieron en el mismo sobrevivieron y continuaron reproduciéndose después del ensayo. Pero no es éste un método único para resolver el problema de las poblaciones superabundantes de palomas. Por el contrario es una opción  no letal a largo plazo, para el manejo integrado de tales poblaciones de una especie invasiva eocómicamente importante.
El uso exitoso de nicarbazine en el control de poblaciones de palomas dependerá del reconocimiento de sus limitaciones y potencialidades y de la habilidad y compromiso con que se lo incorpore a los esfuerzos de manejo integrado, particularmente en situaciones urbanas y suburbanas.”

Ensayos realizados con nicarbazine en Italia publicados enJunio de 2007 en la revista Wildlife Research 34(4) 306-308 arrojan la siguiente conclusión: “El uso de nicarbazine quizás pueda ser considerado como parte de un programa de manejo de la plaga (de palomas) que necesariamente deberá incluir la reducción de la capacidad portante (de palomas) del ambiente urbano”
 El conocimiento de su dinámica poblacional y de sus hábitos alimenticios favorecerán la utilización de este tipo de herramientas de manejo de problemas de palomas.

Varios productos narcotizantes, tales como el tribromoetanol (Avertin), han sido utilizados en forma de cebos para inmovilizar a las palomas. Las aves adormecidas son luego recolectadas. Numerosos ensayos experimentales se realizaron con este sistema pero, a pesar de su aceptación por quienes generalmente se oponen a medidas mas enérgicas de control de palomas, el método tiene muchos inconvenientes. Ningún producto de este tipo ha sido registrado en los Estados Unidos para el control de vertebrados plaga.

Trampa de dos cuerpos que permite capturar palomas en forma automática y constante.
El cebo es maíz entero y, además, se le coloca un bidón con agua.
Las trampas para cazar vivas a las palomas pueden ser un muy efectivo método de control, existiendo diversas variedades de las mismas. Las hay de embudo, de puertas de un solo sentido, de palito y cuerda, de palito quebrado, etc.; salvo muy pocas excepciones, la de puertas de un solo sentido) suelen ser las mas efectivas.

Las trampas deben revisarse con frecuencia (diariamente si fuese posible) a fin de retirar los animales capturados y para reponer el material utilizado como cebo (maiz entero). La disposición de las aves atrapadas puede hacerse de diferentes maneras, pero jamás se deben llevar fuera del área de captura para ser liberadas puesto que la habilidad de las palomas para retornar al sitio donde se habían establecido previamente (querencia) hará fracasar cualquier programa de control.

Aspectos legales.

Las palomas silvestres no están protegidas por ninguna ley federal en los Estados Unidos, pero las leyes estaduales o provinciales y locales, deben ser revisadas antes de intentar la reducción de la población de palomas mediante armas de fuego o de aire comprimido, trampas o productos químicos.

En Inglaterra las palomas están incluidas en una Ley General de Protección de la fauna, pero quienes sufren una infestación pueden solicitar un permiso especial, fácilmente obtenible, para resolver el problema recurriendo al derecho natural de defensa de la propiedad y de la salud de las personas.

En nuestro País la paloma Columnba maculosa, por Decreto Ley 6704/63 ha sido declarada plaga nacional por la Dirección de Sanidad Vegetal del Ministerio de Agricultura. Mientras que Columba livia queda bajo la acción de la Ley Nacional de Protección de la Fauna, pero cuando por número y comportamiento son causantes de daños o comprometen la salud del hombre, éste tiene el derecho natural defender su propiedad y su salud. Por ejemplo, el director de un hospital es responsable del mantenimiento del edificio y sus instalaciones así como de los aspectos higiénicos y sanitarios.

A nivel  de Provincias, en Mendoza la Resolución de la Dirección Provincial de Recursos Naturales nº 1479 del 8 de octubre de 1998 (de la Provincia de Mendoza) considera que las palomas son animales peligrosos cuando por su número y comportamiento causan daños a la propiedad y ponen en riesgo a la salud del ser humano y de sus animales domésticos, establece responsabilidades y da recomendaciones y sugerencias para su control.

Si se analiza esta situación desde un punto de vista higiénico sanitario algo mas pragmático podemos preguntar: ¿Cuál es la diferencia entre una infestación de cucarachas y una de palomas? o ¿Son mas importantes ciertos aspectos folklóricos o sentimentales que la conservación de nuestros bienes o de nuestra salud?


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1 comentario:

  1. dejeme comentrle que el uso de rapaces en el control aviar no es precisamente la captura de el pichon es masbien el vuelo constante de la rapaz ya que el pichon sabe que el halcon es su depredador natural y la cosa es incomodar al pichon y hacerle saber que no es un lugar seguro para permanecer saludos

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